Hace años me gustaba escuchar las variaciones de ciertas composiciones musicales, con el tiempo, eso de variaciones se convirtió en versiones. Hoy me sigue gustando escuchar la misma melodía interpretada por distintos grupos o solistas, siento como si fuera un problema que se aborda desde diversos puntos de vista. El fondo es el mismo, pero cada cuál le da su toque personal, igual que cuando nos enfrentamos ante un problema es muy interesante contar con muchos puntos de vista, a veces incluso de alguna persona de sentido común, pero que no tenga ni idea de la ciencia o la técnica necesaria para abordar el tema.
Contra esta forma de trabajar, que es el que a mí me gusta, ésta el de la visión simplista (las mas de las veces complicada) que trata el problema desde su único punto de vista personal (también ocurre en “personas grupales”), sin saber si llevan puesta gafas o si lo que tienen delante tiene tres dimensiones y no sólo las dos que se le ven.
A esta forma de trabajar le llamo yo “desvariaciones”, por un lado porque es lo contrario de las variaciones que tanto me gustan, y por otro porque eso es desvariar, viajar sin rumbo (llevan el rumbo recto, pero no por eso llegan al destino deseado).
Todo esto me viene a la cabeza como reflexión de los momentos que vivimos en la ciudad donde vivo, con un paro de más del 30% nos permitimos el lujo de expulsar industrias, porque decimos que contaminan, y nos traemos el producto ya fabricado (a cambio de un buen puñado de euros) de otros países (Marruecos y China principalmente) donde sus chimeneas, al no verse, no nos contaminan. Eso de visión global y acción local algunos lo han entendido por mirarse el ombligo, que es todo lo contrario.
Además tuve el desgraciado honor de parar la producción en las instalaciones donde he trabajado desde hace más de 25 años, instalaciones con más de 40 años, totalmente renovadas, al máximo de producción y que por problemas administrativos-políticos (presionados por grupos ecologistas y de otros intereses) se ve obligada a cerrar.
Pero bueno, no quiero liarme con mis cavilaciones porque en estos momentos debo variar mi rumbo y este blog no está para eso. Por tanto… ánimo y espero que al año empezara bien. Mi esposa me dijo cual debía ser nuestra felicitación este año, que Dios y la fortuna te devuelvan multiplicados por mil todo aquello que me desees.
Saludos y perdonad esta triste entrada.